La incertidumbre es un estado del conocimiento que manifiesta una limitación acerca de una condición que está por suceder. Implicando así una previsibilidad imperfecta de un hecho futuro.
Ser padre o madre implica cierto grado de incertidumbre. Afrontar un nuevo reto profesional genera dudas y lagunas en nuestra previsión sobre cómo será y esto genera incertidumbre. Innovar en una organización supone asumir cambios y cuestionar lo que hasta ahora hemos estado haciendo y esto también genera incertidumbre. Es decir, vivimos en un mar de cambios e incertidumbre, pero QUIZÁS eso no tiene por qué ser malo.